Aúna las propiedades del yodo, pero es más eficaz ya que se inactiva menos por contacto con materia orgánica, se solubilizan mejor en agua y penetran mejor en las células que las diluciones tradicionales de yodo.
Poseen menos efectos de hipersensibilidad e irritación de la piel que el alcohol y el agua oxigenada.
Modo de empleo:
Uso cutáneo, lavar y secar la piel y aplicar una pequeña cantidad directamente sobre la zona afectada de 2 a 3 veces al día, un máximo de tres días. Si no remite la infección consultar con el médico o el farmacéutico.
Aplicar agua jabonosa para eliminar la mancha en la piel o en la ropa.
Precauciones:
No utilizar en la misma zona durante un tiempo prolongado.
Uso externo, no aplicar en mucosas.
Está contraindicado en personas alérgicas al yodo.